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(Pintura de Amédée Ozenfant)
En tránsito a la nada
se precipita el polvo
y aquello que yo fuera
ahora sólo es contorno;
vacía de sentido,
de nuevo en mi la angustia
se sucede al hastío;
me evoca la existencia
tormenta,
lluvia,
frío...
lluvia,
frío...
¡hasta que habéis llegado!,
formas embriagadoras
en medio de mi noche,
descubriendo naranjas
y un sol en esta cueva,
con vuestra voz de piano
mientras me consumía
en la caverna del gris;
y hacéis de la ilusión
de nuevo el paradigma
susurrando dichosas,
oh formas caprichosas
que réis sin razón
trayendo al corazón
un poco de alegría.
Y con vuestra melodía
descubro yo el color
dentro de la ceniza;
y al ver vuestra ascensión,
helicoidales humos,
soporto ya el dolor
que sé de la existencia...
Gracias por la clemencia,
oh sueño evocador,
que me habla a mí de esencias,
fuentes, aguas, fuegos, azules,
verdes, notas, cielos, nubes;
futuros posibles, mientras,
a solas, fumo.
V.H.Gª. Brea
4 comentarios:
Son las dos de la madrugada y,después de leer este poema varias veces (¿seis,siete tal vez?)tengo la sensación de estar leyendo algo familiar,como algo que en alguna ocasión hubiera escrito yo,tal es el grado de identificación con tus versos y,por cierto,no es la primera vez que me pasa leyéndote...
Es una delicia de poema.Es el paso de la angustia a la euforia,el cambio salvador que NO acude en nuestra ayuda,sino que viene porque lo hemos llamado,porque no podíamos seguir como estábamos...un poco de luz en la larga y profunda oscuridad,aunque después,al despertar del frágil sueño,del falso sueño,la realidad sea aún más oscura que al principio...Es lo que trae la euforia repentina y traicionera,más amargura para nuestros labios...pero,¿acaso se puede soportar la amarga soledad cuan es eterna...?
Un placer encontrarme con tu espíritu en estas horas mágicas de
la noche,Mercurio.Un regalo tus versos...Gracias.
Son las dos de la madrugada y,después de leer este poema varias veces (¿seis,siete tal vez?)tengo la sensación de estar leyendo algo familiar,como algo que en alguna ocasión hubiera escrito yo,tal es el grado de identificación con tus versos y,por cierto,no es la primera vez que me pasa cuando leo algo tuyo...
Es una delicia de poema que yo interpreto así: Es el paso de la angustia a la euforia,el cambio salvador que NO acude en nuestra ayuda,sino que viene porque lo hemos llamado,porque no podíamos seguir como estábamos...un poco de luz en la larga y profunda oscuridad,aunque después,al despertar del frágil sueño,del falso sueño,la realidad sea aún más oscura que al principio...Es lo que trae la euforia repentina y traicionera,más amargura para nuestros labios...pero,¿acaso se puede soportar la amarga soledad cuando es eterna...?
Un placer encontrarme con tu espíritu en estas horas mágicas de
la noche,Mercurio.Un regalo tus versos...Gracias.
Mercurio,perdona mi torpeza...he publicado el comentario dos veces...
Lo siento.
Saludos.
Jerónimooo. Venía haciendo un poema en el bus. No me gustaba mucho, pero al leer tu mensaje he decidido colgarlo, tómalo como un regalo. Tiene que ver con el autoengaño, con la esperanza, con la paradójica bondad de la caja de pandora (cuando aveces uno le pregunta si al guardarnos la esperanza no mentía; o si acaso no hay maldad escondida en su pretendida bondad...Tiene que ver con tu comentario; tiene que ver "casualmente" contigo... Un abrazo Jero...
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