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| (Escultura de A. Maillol) |
que nombre tiene el mar en los inviernos.
Llueve en la arena gris, llueve en la extensa
ignorancia del mar, en la impasible
eternidad monótona del agua,
y todo huelga ya, como esa lluvia
cayendo sobre el mar que ignora el tiempo".
De Mar de Noviembre. C. CLEMENTSON.
Contigo y con la vida
todavía bregando...
¿Te crees controlando
aquello que imaginas:
tu timón y tu barco?
Déjame que te diga
que aquí en este lugar,
querida y fiel amiga,
no hay timonel ni guía
que mástiles de barcos
al sol hagan llegar.
Deja ya esta marina.
De este añíl cuadro sal.
Decídete y arriba.
¡Anda, ve Soledad!.
Cólmate de alegría.
Ve a buscar buena gente.
¡Ve Soledad marina!,
vete a un puerto corriente.
¡Ama, ríe, camina..!
que de vivir te olvidas,
amiga Soledad.
Hasta pronto, nos vemos,
en el cierto horizonte
al que tú volverás.
Tu amigo, el Mar.
V.H.Gª.Brea
4 comentarios:
El mar, la soledad, y siempre algún intrépido que los surca a ambos.
¿Te hace un beso?
Tu comentario, y una fábula que también leí después de escribir este poema, me hicieron consciente de su carencia; de la carencia de no haber vislumbrado la complicidad del mar (irracionalidad, abisalidad) con las gentes del puerto; con los isleños y sus leyes (racionalidad, seguridad, tranquilidad)... Soledad contestará a su amigo que su deseo es regresar, pero que lo hará siempre y cuando él le haga saber de algún puerto en que, por su propio bien ("of course"), no fueran a quemar su nave; de un puerto en que tampoco, para proteger a los crédulos, estuviera prohibida la construcción de barcos...
G-R-A-C-I-A-S.
He de admitir que aunque la poesía me gusta, no acabo de entenderla demasiado. Mmm... tal vez sea demasiado lírica para mi.
Me alegro de que llegaras a mi blog por casualidad. Me encantan las casualidades.
¡Un saludo!
Hola:
Sí, las casualidades... Gracias por pasarte. Un saludo, Vorrtx (Vorrtx:¡qué díficil!; me ha costado)
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