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(Pintura de J.M.W. Turner)
"..El erizo despierta al fin de su nido de hojas secas,
y acuden a su memoria todas las palabras de su lengua,
que, contando los verbos, son poco más o menos veintisiete."
Del poema El Erizo. B. Atxaga
Luz artificial
sobre fondo marino,
el zumbar de la nevera,
el decir de algún felino...
Seis de la mañana.
El día nace
sin cobijar al sueño
(olvidado...).
El día nace
sin albergar proyectos
(¿y mi ilusión?...).
Pero el día que raya,
aun sin ayer su cielo,
aún noche guarda
¡y me contagia!
(o quiero...).
Pero el día que raya,
aun sin ayer su cielo,
aún noche guarda
¡y me contagia!
(o quiero...).
V.H.Gª. Brea
2 comentarios:
Los felinos rugen o maullamos, según tamaño e importancia. Mas cuando raya el día, o muere la noche, lo que suele escucharse es el canto del mirlo.
Tal vez mañana atrape alguno...
Precioso poema.
¡Se agradece el maullido, gato!... Dudé entre el rugir y el maullar y elegí un decir, pero se refiere al del gato -que se me antoja un decir casi exclusivo para sí mismo-, no al del rey de la selva -con afán dominador-. Un abrazo.
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